¿Qué tanto hemos dejado de ganar y cuanto hemos perdido por no haber estado dispuestos a incomodarnos? Si pudiéramos ver a la incomodidad de otra forma, con una perspectiva diferente y darnos cuenta que mucho de aquello que deseamos está detrás de la incomodidad, probablemente habría menos personas quejándose y más personas esforzándose por cumplir sus metas y sueños.